Cumplir con tu plan de tratamiento.
Las personas en la fotografía de arriba son modelos
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Cumplir con tu tratamiento como te lo recetaron ayuda a asegurarte que siempre haya suficiente medicina en tu cuerpo para combatir el virus y ayudarte a lograr un nivel indetectable y a mantenerlo. Indetectable significa que hay tan poca cantidad de virus en la sangre que no puede medirse en una prueba de laboratorio. Y lograr eso puede ayudarte a vivir una vida con VIH más larga y saludable. Al principio podría parecer un desafío, pero es un paso importante para ayudarte a estar saludable. Y da mucho resultado para ayudar a detener el virus. Si cumples con tu tratamiento como te lo recetaron, puedes controlar el manejo de la carga viral de VIH. Los estudios actuales demuestran que seguir el tratamiento para el VIH como te lo recetaron, lograr un nivel indetectable y mantenerlo evita la transmisión del VIH a través de las relaciones sexuales.
Puedes empezar el tratamiento tan pronto como tu proveedor de atención médica (HCP, por su sigla en inglés) lo recomiende. Algunos tratamientos incluso pueden comenzarse el mismo día que se diagnostica la enfermedad.
Hay muchas estrategias que pueden ayudarte a seguir con tu tratamiento para el VIH. Estos son algunos recursos que podrían ayudar:
Es importante que hables con tu proveedor de atención médica sobre los planes de tratamiento que pueden incorporarse a tu rutina.
Comienza por tener una conversación. Durante una consulta con tu proveedor de atención médica, debes saber que puedes hablar de cualquier tema. No tengas miedo de compartir tus pensamientos o sentimientos sobre tu tratamiento para el VIH o tu experiencia de vivir con VIH. Además, no tengas miedo de hablar con tu proveedor de atención médica sobre cualquier situación que puedas estar enfrentando, como tu salud mental o cualquier problema con el consumo de alcohol o sustancias. El proveedor de atención médica tiene en cuenta lo que es mejor para ti, y compartir tu experiencia sincera con él puede hacer que te sientas empoderado y en control de tu propia salud.
Hay muchas personas y lugares a los que puedes ir por asistencia para el VIH. Cuando tienes VIH, es importante recordar que no estás solo. Muchos tipos de personas diferentes conforman tu equipo de apoyo. Pueden ser:
Tú también eres parte de tu equipo de apoyo. Entonces, sigue aprendiendo sobre el VIH y tus opciones de tratamiento, y sé tu propio defensor.
Cuando te reúnes con ellos, todas las preguntas son válidas. Ir preparado es una buena idea. Estos son algunos temas sobre los que puedes hablar con él en su próxima consulta.
